Aunque no lo parezca, las aves que posan tan elegantes en la imagen pertenecen a la misma especie: la Gaviota patiamarilla (Larus michahellis). Hasta que tienen edad para reproducirse, es decir, cuando cumplen 4 primaveras, experimentan diversas mudas del plumaje (que incluyen variantes invernales y veraniegas!). En la foto que ilustra este post, tomada en septiembre del 2017 en el Parc de la Ciutadella, se distingue, en primer plano, una gaviota que va camino de su tercer invierno -me encanta el diseño del pico!- y un ejemplar, el que aparece detrás, que en el momento de hacer la foto apenas contaba con medio año de edad.
Las Gaviotas patiamarillas son aves relativamente longevas que pueden alcanzar los 20 años, así que a nuestras amigas de la foto aún les quedan muchos cielos por recorrer.
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